3/02/2009

El arte de conducir en Lima (Parte 1)

A quién no le gustaría obtener la licencia de conducir para poder sentirse capaz de maniobrar un vehículo automovilístico a su libre albedrío... Quizás hayan algunas personas (poquísimas pienso yo) que no hayan sentido alguna vez las ansias de sentarse al volante, prender el motor y arrancar... pero de lo que (practicamente) estoy seguro es que por lo menos aquí en Lima, de cada 20 jóvenes, a 18 les gustaría conducir un vehículo automotor... sin embargo, de esos 18, menos de la mitad llegan a lograr el anhelo de obtener la licencia de conducir... motivos? quizás por falta de tiempo, quizás por asuntos económicos, quizás por falta de atrevimiento, etc... Pero hay un motivo que sí es totalmente cierto (y quizás por las que un gran número de personas no decidan pugnar por sus licencias, al menos aquí en Lima), el desastre vehicular en todo su esplendor por la que atraviesa Lima diariamente, el caos vehicular, el congestionamiento, el tráfico, los combis y colectivos, entre muchas otras variantes... más que suficientes para que el sueño de conseguir la licencia se esfume (al menos aquí en la capital) por temor a que algo malo pueda sucederles... Es por eso que (para las personas que tengan licencia o para los que planeen obtenerla), no debemos simplemente pensar en querer conseguir el permiso sin pasar desapercibido todos problemas mecionados... Y es aquí, donde quisiera contarles a manera de anécdota, sobre mi poca experiencia (pero aprendiendo cada día un poco más) "al volante" por las calles de la bella y al mismo tiempo caótica ciudad limeña luego de haber obtenido la licencia hace no más de dos meses...

Varias veces que anhelado llegar a obtener la tan ansiada licencia de conducir del MTC (Ministerio de Transportes y Comunicaciones) la cual certifica que una persona mayor de 18 años se encuentra apta para poder manejar un automóvil... sin emabrgo, varias veces (incluyéndome a mi) no siempre por haber sacado la licencia, quiere decir que uno ya sepa maniobrar un carro... eso se aprende con la práctica constante de manejo... lo importante es ser conciente de que estamos en una ciudad (refiréndome en el caso de tránsito vehicular) recontra caótica y desordenada... en el que más que saber conducir, hay que saber más prevenir... el quien previene tiene menor posibilidad de sufrir algún percance... El no festejar como loco por haber podido recibir el permiso para conducir, y el ser conciente de la batalla vehicular que a diario se ve en la capital, son buenos indicios de que estamos siendo concientes sobre lo que estamos experimentando...